Historia
Perteneció a la Jurisdicción de Castrotorafe, como villa del Señorío de la Orden Militar de Santiago, vinculada al convento de San Marcos de León.
En el año 1528 contaba con 156 vecinos, cuando vivió un momento de gran empuje económico y demográfico, como se puede comprender por la proliferación de sus instituciones, pues tuvo siete ermitas, un hospital con su capilla y dos capellanías vinculadas a personajes del convento de San Marcos.
Entre los mayores propietarios de bienes rústicos figuraban el Monasterio de San Jerónimo de Zamora y el Párroco de la localidad. Un personaje notable vinculado a Villalba fue Pedro Álvarez, que vivió en tiempos del rey Pedro I de Castilla. Su biznieto, Alfonso Álvarez, consiguió la hidalguía en 1482, título nobiliario que siguieron alcanzando sus descendientes en el siglo XVIII.