Historia
Recogemos los primeros vestigios de asentamientos humanos en los yacimientos celtibéricos y romanos en las proximidades del Teso de la Mora.
Los mozárabes llegados del sur colaboraron en la repoblación medieval de estas tierras como en Toldanos (oriundos de Toledo). Los descendientes de aquellos repobladores realizaron donaciones a favor del Cabildo de la Catedral, quien mantendrá una influencia permanente en Torres del Carrizal y sus despoblados, interesándose en el río Salado para establecer molinos.
En 1150 recibe la donación de San Mamed, en 1157 los derechos sobre la iglesia de Torres, y en 1168 sobre el templo de Toldanos.
Varias instituciones eclesiásticas mantuvieron un importante patrimonio agrario, como los conventos de Santa Marina, San Pablo o Dueñas, así como la Parroquia y las Cofradías locales, que además poseían bienes singulares como la fragua del Santísimo, el tejar de Santa Cruz o la posada de las Ánimas. Entre los ricos hacendados seglares sobresalían el Mayorazgo de Miguel Trejo y el Señor de Arquillinos.
A mediados del siglo XVIII, cuando ya estaban despoblados Toldanos y San Mamed, se contabilizaban en Torres 52 vecinos, de los que 22 eran labradores y, al finalizar esta centuria, funcionaba una Fábrica de Salitre de buena calidad.