Historia
La presencia humana en estas tierras debió ser muy temprana, de acuerdo con los restos encontrados. Más tarde, en los comienzos de la historia, los vacceos, pueblo celtibérico, levantaba sus poblaciones fortificadas en los suaves altozanos, dedicándose a la agricultura de cereales.
Cuando los romanos consolidaron su dominio integraron las tierras comprendidas entre el Esla y el Duero en el convento jurídico cluniense. De su presencia en la zona da fe el hallazgo de una necrópolis tardorromana, con variados objetos fúnebres y votivos.
Posteriormente los godos se instalaron en esta zona, a la que llamaron “Campi gothorum”. Tras la invasión musulmana surgen los reinos cristianos. Alfonso III decide iniciar la repoblación de estas tierras con gentes de variada procedencia. Los primeros asentamientos parecen datar del último tercio del siglo XIII.
Perteneció primero al alfoz de Valderas y, un siglo más tarde, pasó al de Benavente. El Conde de Benavente le concedió una carta puebla (1468). Pasó a ser villa independiente del Señorío de Benavente (1738) por privilegio real. Un siglo más tarde, abolidos los privilegios señoriales, se llevó a cabo la reorganización de las provincias, pasando a pertenecer a la de Zamora.