Historia
Desde el siglo XII tenemos noticias de esta población, pero su época de mayor auge comenzó durante el reinado de Sancho IV, cuando éste eximió de pagar impuestos a trece pobladores. Su hijo Fernando IV amplió el privilegio en 1307 a veinte vecinos, incluyendo a un maestro de obras, momento en que se levantaría la portada meridional de la iglesia de Santa María.
El Cabildo de la Catedral ejerció un amplio dominio como principal propietario rústico sobre este lugar, cuyo término actual comprende los despoblados de Palomares, Toral y Valduercos.
En el siglo XV se documenta la iglesia de San Martín, pero la devoción a la Virgen de la Hiniesta se hallaba muy extendida por la provincia, y la fábrica de su iglesia gozaba de un importante patrimonio rústico.
En el siglo XVIII contaba con 47 vecinos, de los que 18 eran labradores, que trabajaban en arrendamiento propiedades de las instituciones eclesiásticas, como los conventos de Santo Domingo, Santa Marina o Mercedarios de Toro, además del citado Cabildo y la Parroquia local, entre otros; de los seglares destacaban los mayorazgos de los Miranda y el de los Basurtos. Manuel Herrero adquirió 4.000 fanegas (dehesa de Palomares) en la Desamortización.