Historia
Los primeros asentamientos humanos de este lugar nos introducen en las brumas del mundo romano, según indican los restos arqueológicos del Regato de los Pajaritos, Valdelasierra y la necrópolis de Valdepiélago.
Su emplazamiento actual se debe relacionar con la repoblación efectuada en la Edad Media por los reyes leoneses con gentes llegadas del Norte peninsular, con objeto de asegurar su posesión en las cercanías del río Duero.
Documentación de 1153 informa que fue un lugar feudatario del convento de San Martín de Castañeda, pero que luego pasó a la Orden Hospitalaria de San Juan por cesión del rey Fernando II en 1183. Ese año, María Románez dona sus derechos feudales sobre la parroquia a los canónigos de la Catedral de Zamora.
Sus principales propietarios de bienes rústicos fueron el Cabildo de la Catedral, el monasterio de Moreruela, la parroquia local y las cofradías de Ánimas y de la Cruz; entre los seglares destacaba la extensa hacienda de José Barcia, regidor de Zamora.
Cerecinos conoció un momento de auge con la ampliación de su viñedo y el incremento de sus bodegas, que se tradujo en un aumento demográfico: 116 vecinos a finales del siglo XIX; estos viñedos serían arruinados más tarde por la filoxera.